jueves, 28 de julio de 2016

La vida puede tener un final feliz


Ella era una niña diferente a las otras, sin nadie quien le pusiera limites, con tan solo catorce años, iba a fiestas nocturnas, a veces no dormía en la casa, como se imaginaran los padres unos bestias, no se preocupaban por ella, la niña en vez de recibir cariño, recibía dinero, ¿En que gastaba la plata que los padres le daban a diario? Se preguntaran, pues en Marihuana, ella decía que era su único momento en el que no le afectaba nada, el no recibir amor, el estar sola, o no, pero tener mala junta. Las personas decían que como se crió así, ya no había remedio, hasta ella misma se lo creyó, así que un día decidió irse lejos por un tiempo, a otro país, un lugar lejos de su casa, pero a la vez no para, no arrepentirse y volver.
Él era un niño, o más bien un hombre, buscaba algo con que jugar, con que divertirse, adoraba las drogas, o más bien una, la Marihuana, esta historia un poco diferente ya que tenía 18 años, sabia en que se metía, y, como terminaría, la gente lo apoyaba y aplaudían sus malas, o buenas decisiones, era inteligente, y capaz de lograrlo todo, un hombre fuerte, pero se sentía vacío, sentía un vacío que ni la marihuana se lo hacía olvidar, era un hombre infiel, e infeliz, su novia lo golpeaba, pero era incapaz de dejarla, se mentía a el mismo el estar enamorado, ¿Cómo curaba sus heridas?, pues decía que si le causaba daño a su amada, se aliviarían, se acostaba o besaba a cualquier mujer hermosa que se cruzara en su camino, mientras más hermosa mejor, no le interesaba nada con alguna mujer fea, tal vez una simple amistad.
Entonces ellos se encontraron en su camino, ella actuaba diferente a lo que era ¿Por qué no?, después de todo nadie sabía quién era, en una fiesta que los amigos de él hacían una vez por semana, ella lo observaba desde lejos, mientras interactuaba con la gente, pretendía ser una niña feliz, llena de energía, se ganó el cariño de todos, menos el de él, ella conoció a una muchacha que al tiempo se volvió una gran amiga, y pues, decidió mudarse con ella.
Su amiga era algo interesante, tenía 21 años y era la mejor amiga de aquel chico, él iba varias veces a la casa de ella, tomaban mates, miraban la tele o jugaban a las cartas, mientras la niña solo tomaba asiento en el sillón y los observaba, un día su amiga,  necesito la ayuda de los dos en la casa, pero por un inconveniente de la familia, tuvieron que quedarse solos.
Y allí están la pequeña, con el joven adulto, observándose, a él le parecía una persona sorpréndete, tierna, de tamaño pequeño, pero llena de energía, mientras que ella lo veía como un hombre serio, al que le interesaba descubrir, dulce, aunque no lo demostraba, el típico “Chico malo” de todas las películas de amor. Pero esto no era una película, se decía ella, de repente el teléfono de ella suena, interrumpiendo sus pensamientos, ella responde, era su nuevo novio, le dijo que terminaban ya que el solo estaba interesado en su cuerpo y al ver que la niña no estaba dispuesta a dárselo, pues ya no tenía ningún sentido, la niña con lágrimas en los ojos cuelga el teléfono,  dirigiéndose a la cocina, un poco preocupado el chico se acerca, al tocarla, la niña reacciona, lo mira con una sonrisa falsa y con los ojos llenos de lágrimas, el un poco molesto, la abraza tiernamente de la cadera. Sus lágrimas comenzaron a caer, solo se escuchaba a la niña llorar en aquella habitación.
Gracias a ello, comenzaron a ser buenos amigos, ella comenzó enamorarse, pero no lo demostraba, mientras que el, bueno tenia novia, le contaba las cosas que su novia le hacía y como se sentía, la historia cambio un poco, cada vez que él iba a la casa de la mejor amiga, en vez de observarlos desde lejos, el comenzó a incluirla en todo, un día la mejor amiga de aquel joven le confeso, que la pequeña, estaba por cumplir años y quería festejárselos, hacía más de dos años que estaba allí, viviendo con ella, ya la tomaba como una hermana, Ámbar la joven de 23 años cumplidos organizo, una gran fiesta para su pequeña amiga Magali, que en ese entonces cumplía 16 años, invito a todos sus amigos ya que Magali solo la tenía a ella y a Matías, del que tan enamorada estaba, al comenzar la fiesta de la forma que se trataban comenzaron a darse cuenta los sentimientos que ella le sentía a él.
Era la primera vez que Matías la veía arreglada, se dio cuenta, del buen cuerpo que aquella niña tenía, de cómo había cambiado, la empezó a ver con otros ojos, pero estaba confundido, a pasar el tiempo ella comenzó a ser más tierna con él, comenzaron a salir más, hasta que un día al no aguantarse el deseo, Ámbar lo beso, su primer beso, fue uno pequeño, dejándolo a él con ganas de más, pero el, al querer besarla, ella se apartaba.

Sus historias comenzaron mal, sin cariño, vacíos, para ellos la vida era una condena, y la droga una escapatoria, pero como día de lluvia, al final siempre sale el arcoíris, el dejo a la novia, y encontró una mejor, alguien que lo valoraba, que lo amaba, le daba alegría a su vida, y ella gracias a él,  dejo de ser una niña, se convirtió en una mujer, él se había quedado con todo, su primer beso, su primera vez, hasta se podría decir que su primer amor, gracias a, el descubrió que es que se preocupen por ella, una llamada, una simple pregunta, ¿Llegaste bien?, un simple buenos días, o, buenas noches, la hacían feliz, descubrió que es el cariño. Gracias, a, el descubrió que es el vivir, y se dio cuenta que la vida, si puede tener su final feliz.

Compartir

no se pierda

La vida puede tener un final feliz
4/ 5
Oleh

Subscribe via email

Suka dengan artikel di atas? Tambahkan email Anda untuk berlangganan.