Capitulo 4 "Una personalidad que no conocia"
Mientras Lucia, caminaba
en el pueblo, buscando algo para comer, un militar la tomo del brazo y la llevo
hacia un cuartel. Allí comenzó la interrogación.
Los militares comenzaron a golpearla, preguntando ¿dónde está Ramiro? Y exigiendo
una respuesta. Ella no contestaba, Luego de unas horas, se dieron cuenta que no
iba a hablar así que la descartaron de nuevo en la aldea. Donde Lucia callo inconsciente.
Al despertar se encontró
nuevamente donde estaban refugiados y ramiro dormido al lado suyo. Ella algo
sonrojada lo miraba.
Ramiro: ¿Quién te hizo esto?
Lucia: ¿No dormías?, no es importante.
Ramiro: Claro que lo es, estas lastimada, golpeada.
Lucia: ¿A quién le importa?, Concentrémonos en buscar
a mi hermana – Algo molesta, levanta la voz-
Ramiro: Primero y principal, no me grites, y segundo,
si no empiezas en preocuparte por ti misma, te llevare a mi cuartel y daremos
por terminado la búsqueda de tu hermana
Lucia: Tú no tienes por qué mandarme, no tienes
derecho. Así como no tenías el quitarme mi primer beso –Ramiro se queda callado
y sale de la habitación, Al hacerlo, Lucia agacha la cabeza, comienza a tocar
su cara, y suelta en llanto, le duele más no ver a su hermana que las heridas
mismas. En ese momento Ramiro entra. Nuevamente con el botiquín en la mano. Y con
una voz severa dice “desvístete, o yo lo haré”, ella comienza a desvestirse
quedando en ropa interior, Ramiro con una mirada fría, comienza a examinarla,
mientras Lucia llora.
Las delgadas y frías manos de Ramiro recorren todo su
cuerpo mientras la va curando, Al terminar la tapa con una manta y la abraza,
ella esta fría, asustada, aturdida, y muy avergonzada. Pero a él no le importa,
la rabia lo consume, no puede creer a que punto llegan para encontrarlo, para provocarlo.
Lucia con la voz temblorosa “Lo siento, no quise que te enojaras”, a lo que él
contesta, “no es con vos, ¿te duele?” ella niega con la cabeza.
Ramiro: tienes que entender que no estás sola, tienes
un equipo, el cual se preocupa, el cual si tú te metes en líos, nosotros también.